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La lunita, el ángel y Natasha.

Natasha era una chica solitaria con una vida un tanto desordenada, pero tratando de acomodarla y en su afán de no poder sentirse feliz, decidió ayudar a las personas que posiblemente lo necesitaran, por lo menos así tendría algo de felicidad. Por otra parte, una niña llamada Lunita tan pequeña e inocente, disfrutaba de sonreír, de ver lo que pasaba a su alrededor y detestaba dormir. Pobre Ángel que tenía que cuidar de ella, pero él siempre fue muy dedicado a ella y se sentía tan dichoso que de entre miles de ángeles, justamente él fuera el indicado para cuidar a Lunita a la cual adoraba y quería mucho.

Una vez el Ángel, intentaba hacer dormir a Lunita, pero la pequeña estaba más hiperactiva que nunca y en ocasiones le gustaba arrancarle las plumitas de las alas del ángel y ella no paraba de reir al verle la cara de molesto a su ángel cuidador. Obviamente los ángeles no pueden estar enojados, por lo cuál ambos terminaban sonriendo. Aunque no siempre era bueno desvelarse. Las plumas del ángel comenzaban a ponerse azules, lo cuál no era buena señal de salud y menos cuando se vive en el planeta tierra. Así que un día el Ángel pensó que sería buena idea conseguir un poco de ayuda hasta que al menos sus plumas dejaran de ser azules. Para ello debía encontrar a una persona con mucha paciencia, pero con un corazón tan bondadoso y grande como la Luna. Así que el destino hizo que Natasha fuera la elegida. Una noche de abril en la solitaria casa de Natasha, ella ya se disponía a dormir, pero al acostarse se topó con algo que estaba en su cama, primero pensó que sería la almohada, pero de pronto un llanto inundó el cuarto. Ambas se asustaron e inmediatamente Natasha encendió la luz y vio a la pequeña niña, eso parecía absolutamente imposible de suceder, pero aún así con el susto que aún sentía, ella tomó en sus brazos a la niña para tratar de calmar su llanto. De pronto apareció el Ángel a su lado y Natasha aún sorprendida no podía ni hablar, pero luego ella pensó que todo era un sueño extraño, así que siguió la corriente con todo lo que sucedía. El Ángel le explicó toda la situación y que necesitaba de su ayuda para recuperarse. Natasha aceptó sin dudar, además se sentía muy contenta de tener a alguien a su lado.

El ángel siempre le estaría asistiendo cuando fuere necesario. Entre la Lunita y Natasha existió una conexión muy fuerte que hasta el mismo ángel quedó sorprendido de que pasara tan rápido. Quien la viera a las dos, jugando con las mascotas de Natasha, ¡parecían dos niñas! – dijo el Ángel. A Natasha le gustaba ver la serie infantil Pocoyó, así que pensó que sería bueno verlo con Lunita, la sentó sobre sus piernas, la abrazó y ambas estaban entretenidas viendo tv, mientras el Ángel aprovechó para descansar un poco.

Un tiempo después justo a la hora de dormir, como siempre la Lunita no gustaba de eso, así que Natasha tuvo que ideárselas para hacerla dormir. Primero la cargó en sus brazos, puso música y mientras Natasha la mecía de un lado a otro, Lunita comenzó a cerrar sus ojitos. Natasha se sentía como una verdadera madre para Lunita y gustaba de su compañía, así como también gustaba de hablar con el Ángel; el cual iba recuperándose mejor.

Así pasaron unos meses, hasta que Natasha comenzó a tener fuertes dolores en el estómago, los cuáles no eran novedad para ella, pero dichos dolores se intensificaron cada vez más, por lo que tuvo que ir al médico y realizarse algunos exámenes. Nadie jamás pudo suponer lo que pasaría después. A Natasha le detectaron un cáncer en el estómago causadas por una extraña bacteria. No había salvación pues su estado ya estaba avanzado. Habló de eso con el Ángel, el cual inmediatamente de saber la mala noticia, se puso a llorar. Natasha le comentó que haber conocido y compartido ese tiempo con Lunita, fue lo más lindo que le pudo haber pasado en la vida y que siempre le estaría agradecido a él por ese hermoso regalo.

Natasha entre llantos pensaba que jamás vería crecer a Lunita y que nunca más podría tenerla cerca; el solo hecho de pensar que nunca más la volvería a ver, le destrozaba el corazón. Era más el dolor sentimental que el dolor físico de su enfermedad. Natasha le pidió a su gran amigo el Ángel que se llevara a Lunita lejos de ella, para no sufrir más. Por última vez ella abrazó a Lunita, lloró y habló con ella.

Lunita tan pequeña no comprendía mucho, pero pudo intuir lo que sucedía; Natasha al entregársela al Ángel, Lunita comenzó a desesperarse y llorar incesantemente. Natasha tampoco podía dejar de llorar y le dijo al Ángel que se fuera. Pasaron 5 meses y finalmente la dulce Natasha pudo descansar de sus males. Hay quiénes dicen que la tristeza en su corazón adelantó su eterno descanso.Mucho tiempo después, cuando Lunita ya estaba más grande, le preguntó al Ángel dónde estaba Natasha, pues él siempre le habría estado contado a Lunita sobre ella. Por lo que el Ángel respondió a su pregunta:

– Natasha está ahora cerca del cielo, vive en la Luna. Y estoy seguro que desde allí, ella siempre ha estado pendiente de ti. Ella es una de esas ángeles que no tuvieron alas, pero que fueron enviadas a la tierra para darnos una gran lección de vida. – Dijo el Ángel casi con la voz entrecortada y lagrimeando.

Autora: Natalia Cartolini

Espero que les haya gustado mi cuento, sé que es un poco triste, pero como ya sabrán, siempre escribo lo que siento. De paso quiero desear Feliz día de las Madres para todas sus mamis. Quiero felicitar a mi Mami especialmente, sé que ella también es una de esas ángeles que están en la tierra y que no tienen alas. ¡Te quiero mucho, Ma!

14 comentarios en “La lunita, el ángel y Natasha.”

  1. Te felicito no por ser madre…ja,ja,ja pero si por haber escrito un auténtico cuento impregnado de esa ternura de la que sólo las madres saben regalarnos sin esperar nada a cambio.</>Creo que si tu madre lo lee sabrá cuánto la quieres.</>Besos multicolores y feliz día a todas las madres del mundo!!!

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  2. …un felíz día para tu mami Naty, y tu cuento, pucha que triste, me hiciste aguar los ojitos…</></>:(</></></>Lo chévere es que solo es un cuento.</></>Un besote mija ?

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  3. felicidades a tu mamiiiii!!! tu cuento me recordo a un amigo imaginario que tuve cuando nena y q siempre lo he creido mi angel guardian…</></>pero parece q tiene algo de biografico no???

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  4. Ahh te juro, yo pensé que mi comentario anda aca desde ayer… (la tecnología me odiaaaaa)</></>A very sad history…. but very nice….</></>:) and tell me, my friend, who are you? espero que el Ángel… o l niña….

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  5. Lo bueno de escribir es que todo sale del corazón, tú pareces ser una niña muy sensible, detallista pero con los pies sobre la tierra, sabes qué camino es el que debes tomar, gracias por lo que me corresponde de felicitación por el día de las madres, no te contesté en twhirl porque lo vi tarde, otra vez gracias Nati, muy querida tú.

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